Elogio de la sombra

Al fondo de la montaña es un proyecto artístico de creación compartida entre escritores, artistas y chicos del barrio de Parque Patricios. A la vez que promueve la participación y el intercambio, recupera una técnica narrativa de gran poder de sugerencia y economía de recursos como es el teatro de sombras.

En la primera fase escritores y poetas coordinan una jornada de escritura para alumnos de primaria. El soporte del encuentro es la escuela pública.

En un segundo momento, artistas realizan obras de teatro de sombras a partir de una selección de los relatos elaborados por los chicos.

La tercera etapa corresponde a una función de teatro de sombras en el Centro Cultural Nómade, albergado en CheLA, con los autores de los relatos y sus familias como invitados de honor.

El proyecto pone en relación a actores del arte y la educación proponiéndoles algunos desplazamientos en sus modos habituales:
Los escritores llevan la lectura de su obra a la escuela, a un público infantil para el que trabajan luego como asesores. Conocen su contexto, sus temas, sus modos de producción, sus necesidades.
Los alumnos de escuela tienen un contacto de primer mano con escritores que aparecen en un lugar de autoridad más compartida. La relación con artistas visuales reconocidos también se invierte: es habitual que en la escuela se trabajen contenidos a partir de obras de arte, en general históricas. Esta vez son los artistas quienes toman como punto de partida las producciones de los chicos. Ver obras en cuya producción participaron, en el contexto del arte, les permite a esos jóvenes estudiantes asumirse como público capaz y autorizado para hacer una lectura desde cerca de las mismas, y de otras.
Los artistas trabajan a partir del encargo de un grupo de alumnos de escuela primaria en vez de una institución, galería o coleccionista. Adoptan un formato y un lenguaje de una tradición no muy practicada en el medio, junto con las temáticas que los chicos de esa comunidad traen. Dejan el trabajo solitario en el taller para reunirse a crear con otros. Conectan con un público infantil y un contexto generalmente excluidos del mundo del arte contemporáneo y sus espacios de circulación.

Es el objetivo que esos chicos puedan establecer una relación diferente con la producción cultural, que les permita apropiarse de estrategias del arte, que aparecen más cercanas. Al mismo tiempo que llevar a intelectuales en actividad a contextos, problemáticas y públicos que el arte contemporáneo suele dejar al margen. Un proyecto colectivo en que todos comparten sus saberes.

Este proyecto es un punto de partida. Su misma mecánica promueve nuevas etapas, que involucren nuevos desplazamientos y circulaciones entre niños, artistas, espacios de exhibición, modos de producción, arte y escuela.